A veces vivimos en una realidad que nos hemos creado, a la cual nos hemos acostumbrado y en la cual a penas vislumbramos la luz. Ocurre que durante largo tiempo vivimos en ella y la hacemos nuestra llegando a creer que es la única realidad existente, y que no hay nada fuera de ese mundo salvo el abismo. Es nuestro universo, el único que conocemos, al único que tenemos acceso, el que catalogamos de más seguro. Pero esa seguridad se nutre de nuestras propias inseguridades, se fortalece de nuestros miedos, y es, ese miedo a lo desconocido lo que nos hace aferrarnos a nuestra cómoda realidad, sin ser capaces de traspasar la frontera que tenemos marcada, de ir más allá de la linea de actuación que se nos ha concedido.
Pienso que es dificil acostumbrar los ojos a una luz nueva, pero para mí se hace realmente necesario, no me conformo con aceptar la realidad tal cual es, sin por lo menos no intentar transformarla. Quizá algún día llegue a poder saltar al vacío sin importarme si la red está puesta, por el momento "voy siendo" aquello que espero algún día llegar a ser. Y este "ir siendo" aunque a veces doloroso, me hace sentir viva.
Pienso que es dificil acostumbrar los ojos a una luz nueva, pero para mí se hace realmente necesario, no me conformo con aceptar la realidad tal cual es, sin por lo menos no intentar transformarla. Quizá algún día llegue a poder saltar al vacío sin importarme si la red está puesta, por el momento "voy siendo" aquello que espero algún día llegar a ser. Y este "ir siendo" aunque a veces doloroso, me hace sentir viva.
2 beduinos en el desierto:
Muy lucido lo que has escrito. A veces me parecía que me estaba leyendo.
Personalmente, achaco al miedo, mejor dicho, a los miedos, todos los males de este mundo. El miedo es ignorancia y rutina, también es la ponzoña que envenena el alma humana hasta degradarla.
Curiosamente he escrito varias veces sobre ello.
Me alegra este encuentro.
Un gran abrazo.
Gracias Suri por pasarte por aquí.
El miedo supone un riesgo que no todos son capaces de asumir, pero si no nos enfrentamos a nuestros propios miedos y fantasmas, nos quedamos estancados y se nos hace muy difícil avanzar.
El miedo puede ser analizado desde muchas vertientes, entre otras, también es el arma más poderosa para los que ostentan el poder.
Saluditos.
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