Canibalismo en Otoño (Salvador Dalí)


Sales como rata de tu madriguera, trepando por las acalcantarillas, arrastrándote por el cemento gris y polvoriento, recorriendo cada una de las aceras que otros pavimentaron. Surcas con tu olfato cada esquina, cada rincón, cada minúscula partícula que te lleve tras el rastro de tu presa, aniquilando la envoltura de los adoquines trazados sobre el asfalto desdibujados por tus agrietadas garras sanguinolentas..........
Huyo, corro, tropiezo, caigo, a gatas trato de salir de este callejón sin salida, desprenderme de tus garras, de tu fortaleza que aprisiona mi cuerpo, de tu mirada consumista que trata de devorarme en este preciso instante, te veo acercarte con tu baba goteando sobre mis pasos cansados, trato inútilmente de levantarme, de recobrar la compostura, no quiero rendirme, no quiero que me engullas convirtiéndome en un ser como tú, no quiero dejarme llevar por este cansancio que me atenaza, que me pide agritos que abandone esta inútil lucha que mantengo conmigo misma; aún así consigues acorralarme en este rincón y que la fría pared me envuelva con su humedad, haciéndome temblar de miedo, sintiendo como el pulso se me acelera y como el corazón palpita con fuerza ante el inminente ataque. Siento miedo al percibir el nauseabundo hedor que desprendes y que me hace saber que estás cerca, tan cerca que ya puedo olerte y quedar impregnada de tu peste maldita; tus enormes zarpas consiguen desgarrar la parte superficial de mi ser indomable; me hieres con la esperanza de guardar bajo llave mi alma, esa que tanto ansías y que desesperadamente quieres hacer tuya. La sangre se esparce mientras un dolor frío recorre mi espina dorsal para penetrar en mis entrañas, noto ese gemido de mis gritos ahogados que no parecen ser escuchados, pues ya no quedan almas vagantes en este lugar, sólo seres inertes que de algún modo ya hiciste tuyos. Lloro amargamente sintiendo como mi cuerpo desfallece en la angustia que trepa por mi estómago para perderse en unos vasos sanguíneos dilatados, pero aún así, yo sigo sin quererme rendir, sin someterme a tus deseos caníbales, sin darte tregua ni respiro, pues quiero creer que mi alma sigue intacta por mucho que tus garras sigan aprisionando mis carnes, jamás mi esencia será tuya, pues mi “yo” quiere volar libremente por un cielo que tú, bestia inmune, eres incapaz de atisbar; podrás quedarte con este cuerpo que tan solo es carne que poco satisfará tu apetito voraz, pero aquello que soy, aquello que llevo dentro, aquello que me da la vida, mi último aliento, jamás será tuyo aunque irónicamente creas haber vencido. Dibujada queda en mi rostro una leve sonrisa que es el reflejo de tu perplejidad, aquella que ni entiendes ni entenderás, mientras mis órganos vitales lentamente se apagan y consigo dejar de escuchar tus voces de ultratumba, me alejo del charco de sangre que dejaste bajo mi cuerpo, vuelo libremente lejos de ti, de tu vorágine interna, que inútilmente se contrajo al creerte poseedor de algo que no te pertenecía: mi libertad.

(Y sé que tras de ti hay mundo, el mundo que me está esperando, el que tengo que conquistar, aquel cuyo mapa tracé en mis sueños, aquel que un día acariciaré con la palma de la mano abierta cuan arco iris que sale tras la tormenta, y tú quedarás atrapado en ese espacio de cristaleras, mirando desde dentro pero sin ver, gastando tu oxígeno sin respirar aire puro, consumiendo lo consumiblemente mediocre, ahí quedaras encerrado en tu palacio de cristal soportando los vientos de las modas, cambiando como el camaleón con tu vestido de camuflaje, pero sin conseguir jamás ser tú mismo, y yo desde el exterior, desnuda y sin disfraces ni máscaras, te haré burla, porque una vez me hayas desgarrado por completo, cuando creas que ya no puedes sacar provecho de mí, sé que me dejarás tirada en este mísero callejón, y desposeída de todos esos disfraces que me ofreciste y que yo conscientemente me puse creyendo así que iba a contentar a la bestia, que iba a frenar su ataque sin saber que lo que realmente necesitaba era ese desgarro interno que hace tambalear ahora mi mundo y que me libera de tus garras prisioneras de modas superficiales y de estandartes banales).
(Gracias Dani, por ayudarme con mis vómitos, tú ya me entiendes).
Ruth: 21/3/10

10 beduinos en el desierto:

Uff, Que Escalofrios me han entrado al principio, contemplando esas escenas de horror y miedo...pero como bien dices por mucho que alguien desgarre y aniquile tu cuerpo, tu Alma y lo que Tú Eres Nadie ni Nada podrá terminar con Ello.
Un Excelente Relato, como siempre me dejas Sorprendida y Ansiosa de principio a fin.
Mil Besos

Vaya!!!Hecha un guiñapo te ha dejado jajaja. Bueno el alma supongo que remontará vuelo, el cuerpo es envoltura...
Bésix

¡Cuanto mal ha hecho, en este sentido, el platonismo!

¡Qué épico es tu escrito! Justo como la vida misma. Hay demasiadas bestias a las que enfrentarse en este mundo, especialmente las que llevamos dentro. Lo bueno es que también dentro llevamos a ese humilde y maravilloso héroe que nos puede liberar de todas nuestras pesadillas.

Pero hay que hacerle caso...

Escribes genial, Ruth.

Un gran abrazo, mi querida escritora.

Gracias mi fiel Mariaje, me siento cada vez más en deuda contigo.

Besos.

Querio Calvin, espero remontar el vuelo pero en cuerpo y alma jajaja.

Besos.

No te entiendo ni pijo Bernardo, pero supongo que te refieres a lo del alma, cada cual tiene sus propias concepciones de eso que llamamos "alma" por muy platónico que suene. De todos modos en este texto todo es metafórico, hasta el "alma", no me refiero con ella a nada espiritual sino todo lo contrario, a mi "yo" interior, a poder ser yo misma sin importarme realmente lo que piense la gente, tarea ardua y difícil en mi caso. Quizás por eso necesito de esa autofagia que me libere de todo aquello que me sobra y que fui adquiriendo sólo para contentar a los demás.

Besos.

Mi querido Suri, como tu bien dices, la mayor bestia inmune la llevamos dentro y es esa a la primera que hay que vencer, de lo contrario vencer fuera de nada nos serviría.

Gracias por tus halagos mi querido ESCRITORRRRR!!!!!!!!!!

Besos.

Jajaja lo de bernardo si que es bueno jejeje.
Escucha que es un placer estar aquí como tu lo estás ahí. El texto ya sabes que me parece en algunos puntos, pero está muy mejorado.
¿La parte final es tuya? Porque si es así, ahora si, te doy el mayor Wowwwwww que nunca te haya dado. Es espectacular

Querido Lein, esa es la parte que no te dio tiempo a ver ¿recuerdas?

Gracias por eso wowww, ya sabes lo mucho que me gusta.

Besitos.

Si no me vas a leer no hace falta que te pongas en la lista...

Datos personales

Mi foto
Defiende tu derecho a pensar, porque incluso pensar de manera errónea, es mejor que no pensar....... HIPATIA DE ALEJANDRIA

GRACIAS JOSE ALFONSO

A Ruth Carlino (Viajando al desierto) .6 de Septiembre .Festividad de Ntra. Sra. de las Viñas .

"Percibo que, de repente,
conmigo viaja la gente.

Se paga al nacer, peaje
y todo es peregrinaje,
cada cual con su bagaje
en pos del cierto accidente.

Percibo que, de repente,
conmigo viaja la gente.

Trenet de feria es la vida.
Bien a la vuelta o en la ida,
sobre raíles se olvida
que no es cierto lo aparente.

Percibo que, de repente,
conmigo viaja la gente.

Llega el otro y marcha el uno.
El de acá es más oportunoque el de allá,
no habiendo alguno.
Todo igual es diferente.

Percibo que, de repente,
conmigo viaja la gente.

Quién soy yo; por dónde voy;
cuál será mi destino hoy,
me pregunto, por qué estoy
si al estar, vivo en pendiente.

Percibo que, de repente,
conmigo viaja la gente".

Jose Alfonso.
http://callejadelahoguera.blogspot.com/